El más elegido por las mamás y los peques! Mientras clasifican los cilindros por colores y tamaños, no solo se divierten, sino que también: – Desarrollan habilidades cognitivas fundamentales, como el razonamiento lógico. – Acompaña al desarrollo de la motricidad fina, esencial para la escritura y otras actividades precisas. – Refuerzan la concentración, preparándolos para futuros aprendizajes. – Aprenden a diferenciar tamaños (“grande” y “pequeño”) y asocian colores de manera intuitiva.