El Servicio Penitenciario avanza en la temática de la perspectiva de género y crea la Unidad de las Mujeres y Disidencias


Estará disponible tanto para el personal penitenciario como para las personas privadas de la libertad para aportar un espacio que contribuya a dar solución a esta problemática social.

El director del Servicio Penitenciario de Mendoza, Eduardo Orellana, firmó la resolución que da lugar a la creación de la Unidad de las Mujeres y Disidencias, con el objetivo de incorporar dentro de la institución carcelaria, un espacio jerarquizado para prevenir y erradicar cualquier tipo de violencia o discriminación por razones de género, sexo u orientación sexual.

Este lugar, estará a disposición no sólo para el personal penitenciario sino también para las personas privadas de libertad con necesidad de llevar adelante, acciones tendientes a erradicar las desigualdades por razones de género, que puedan presentarse en el ámbito laboral, familiar y social, creando instancias de capacitación, diálogo y resolución de conflictos que aporten soluciones a la problemática.

Para ello, se propuso que quien esté a cargo sea la Oficial Subalcaide Nahir Otero, abogada y especialista en el tema. “El Servicio Penitenciario como institución gubernamental tiene la necesidad de adaptarse y actualizarse a la realidad que la sociedad vive, esta Unidad viene a fortalecer un trabajo que empezamos hace algunos años para tratar de dar respuesta a reclamos históricos. Nuestra institución debe amparar y garantizar que cada persona que forma parte del sistema se sienta incluida, representada, respetada y garantizada en todos sus derechos”, explicó Otero.

De esta manera, se intentará que mediante protocolos de actuación, se puedan aplicar políticas de prevención, promoción y resolución en el ámbito del Servicio Penitenciario, garantizando un ámbito laboral y de convivencia institucional y social, libre de cualquier tipo de violencia y/o discriminación.

Asimismo esta Unidad abordará también la situación de los niños y niñas alojados junto a sus madres, velando por que los mismos gocen de todos los derechos y garantías establecidas legalmente y garantizando una crianza, desarrollo y formación integral basada en el respeto y la libertad.