“El Balance Hídrico será una herramienta imprescindible para la gestión del agua en Mendoza”

El Departamento General de Irrigación, avanza en la realización del Balance Hídrico para la provincia de Mendoza, un estudio que determinará la disponibilidad hídrica por cuencas y sus correspondientes actos administrativos. Su realización, la que ya avanza en el cuenca del Río Tunuyán Superior, viene a cumplir un mandato constitucional y el Superintendente José Luis Álvarez, lo estableció como uno de los principales objetivos del Plan Agua 2020.

Como parte de los procesos del Balance Hídrico, Irrigación a través de un convenio suscripto con la FAO, reunió distintas visiones internacionales sobre el tema, en base a exitosas experiencias.

Este seminario de intercambio científico es el que se desarrolló en el Colegio de Ingenieros y Geólogos de Mendoza, donde se analizó la planificación estratégica para cuencas hidrográficas. “El Balance Hídrico será una herramienta imprescindible para la gestión del agua en Mendoza, será además continuo y periódico”, destacaba Mario Salomón, secretario de Gestión Hídrica de Irrigación.

Uno de los aspectos más destacados del Balance Hídrico, es que el mismo responde a tres considerandos fijados en la constitución provincial, que data de 1916. Por un lado se determina que la entrega del agua, debe hacerse según el tipo de cultivo y suelo, por otro habla de una reasignación de derechos, de lo que son concesiones eventuales a definitivas. Todo sobre la base de un previo aforo de los ríos, lo mismo que la necesidad de extensión de los cultivos.

Un gran tema no incorporado constitucionalmente, es el de la eficiencia y ahorro, motivado esto, en que durante el siglo pasado la preocupación se centraba esencialmente en la oferta hídrica, dado que no era una preocupación la demanda. La gran temática que sumará el actual tratamiento del Balance Hídrico, es precisamente el uso eficiente, y este involucrando a todos los aspectos vinculados al uso del agua.

Entre los distintos aspectos que tanto los profesionales de Irrigación, como los especialistas mundiales realizaron, estuvo la consideración del factor de cambio climático. Se trata de una variante de gran valor, para la modelación de distintos escenarios futuros, en función a la oferta.

“El Balance Hídrico es un proyecto que apunta ser una planificación de los recursos hídricos a largo plazo, será un instrumento para la gestión del agua”, subrayó Luis Loyola, Oficial de Apoyo en Inversiones para la FAO.