El EPAS acerca soluciones a los usuarios del Pedemonte


El EPAS viene trabajando desde el 2013  junto a organismos e instituciones afines, la problemática del agua potable y las cloacas en el Pedemonte mendocino. De esta forma, ha realizado reuniones para elaborar una manera eficaz de afrontar dicha tarea a futuro.

La mayor preocupación radica en la forma en que la población de la zona construye en el Pedemonte mendocino, y sigue comprando en forma indiscriminada lotes aun consientes de la carencia de los servicios básicos. Vale aclarar que los actuales habitantes de la zona por ahora se proveen del recurso hídrico a través de camiones cisternas.

Junto a la Agencia Provincial de Ordenamiento Territorial y demás organismos competentes, el EPAS realiza reuniones para abordar el tema de la distribución de agua potable y cloacas para la zona en cuestión, teniendo como referencia ineludible, las leyes específicas 4886/86, 5804/90, el decreto reglamentario 1077/95 y la Ley de Ordenamiento Territorial.

La actual situación, producida por los asentamientos inmobiliarios que se están radicando en la zona, generan la necesidad de que el ente regulador articule un diseño a futuro y se ocupe de llevar a cabo las acciones necesarias con los distintos organismos municipales, provinciales y científico-técnico, con la finalidad de abordar en forma global e interinstitucional esta problemática.

Teniendo en cuenta que el servicio público de agua potable y cloacas es la parte fundamental de un complejo sistema “integral”, las dificultades a resolver son: la urbanización en la zona, realización de obras hidráulicas, riesgo sísmico, riesgo aluviónal, educación, seguridad, vialidad y salud.

En este sentido, se deben plantear las soluciones en función de políticas de asentamiento en el Pedemonte del Gran Mendoza coordinadas y previamente estudiadas, poniendo en relieve la idea de lograr un efectivo Ordenamiento Territorial y brindar un sistema sanitario eficiente para toda la población del lugar.