Empresarios de San Rafael buscan ser los principales productores de azafrán del país


El Ministerio de Agroindustria y Tecnología a través del Instituto de Desarrollo Comercial (IDC), recorre los departamentos de la Provincia en busca de la incorporación de más productos al catálogo de oferta productiva.

En esta oportunidad, se visitaron 20 empresas sanrafaelinas de distintos rubros. Una de las firmas consultada fue La Finca Litexco, que busca posicionar a la provincia como el principal productor de Azafrán del país bajo la marca “Azafrán de los Andes”. La misma realizó la presentación de un proyecto que contempla la creación de una cooperativa de trabajo de nuevos productores y la integración con los productores existentes locales.

El titular de la firma, Francesco Gitti, destacó que “la mayoría de lo que se está comercializando Argentina no es Azafrán sino especias molidas compuestas por colorantes que poco tienen que ver con un producto de alta calidad como el que ellos ofrecen”. Por eso, agregó: “la importancia de comercializar el producto en hebra, ya que es a única forma de evitar el productos adulterado”.

Gitti remarcó que “en un principio, se pretende fomentar el cultivo de la flor (Crocus sativus) que crece muy lentamente y su producción demanda dedicación para luego avanzar en el posicionamiento de la marca en el mercado nacional”.

Señaló que “el azafrán se está comercializando fraccionado como producto delicatessen en restaurantes u hoteles para cocina gourmet, logrando mayores beneficios económicos”.

Azafrán en números

Por año, en nuestro país se importan cerca de 3 mil kilos de los cuáles entre 5 y 10 son elaborados por Mendoza y Córdoba, y el resto es importado desde Irán o España por las grandes licoreras a nivel nacional para la elaboración de Fernet.

Para obtener tan solo un kilo, es necesario cosechar entre 150 y 160 mil flores, mondarlas para luego avanzar en el secado de las hebras. Donde se observa el inconveniente mayor para el productor, es en la mano de obra.

En ese sentido Gitti explicó: “cada trabajador cosecha, 500 flores por cada hora de trabajo y el mismo rinde lo tiene la actividad de monda , siendo de este esfuerzo de donde se desprende el mayor costo de producción”.

El proyecto

Se llevará a cabo bajo dos líneas de trabajo, una a través del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) cuyo objetivo es la producción de material genético local, mientras que la otra consiste en la conformación de un consorcio de producción y comercialización.

Prevé la importación y cultivo de bulbos de azafrán durante el primer año de trabajo, siempre, contando con el acompañamiento técnico para los productores.