En Mendoza está prohibido lavar veredas y autos con manguera

La reglamentación del ente regulador está basada no sólo en la emergencia hídrica que padece la provincia desde hace dos años, sino también en el volumen de agua potable que entrañan estos usos no prioritarios.

También está prohibido todo el año el riego con agua potable de calles pavimentadas.

Aprendiendo de la historia

El servicio de agua potable nació históricamente como respuesta a las epidemias de cólera que a fines del siglo XIX asolaban Mendoza y el país.

Era la época en que la ciencia, de la mano de Louis Pasteur, descubría la dimensión bacteriológica (virus, bacterias y otros organismos microscópicos) como causa de la transmisión de enfermedades mortales.

Nacieron entonces las autoridades y estructuras sanitarias y la necesidad de contar con la adecuada infraestructura que permitiera la llegada de agua segura a los hogares.

En 1910 comenzaba a operar en Mendoza la primera planta potabilizadora, Potrerillos, aún en actividad.

Usos prioritarios y no prioritarios

Es prioritario disponer de agua potable para beber, preparar alimentos, higiene personal y uso de los sanitarios.

No es prioritario su uso para regar jardines o lavar veredas y autos.

Éstos últimos son los usos que consumen mayor volumen de líquido, llegando incluso, en épocas de alto consumo como el verano, a poner en riego la disponibilidad de servicio.