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Infraestructura inició una minuciosa restauración en la Mansión Stoppel


El equipo del Ministerio de Infraestructura supervisó esta mañana el comienzo de la obra civil que se esta llevando acabo en la Mansión Stoppel, mientras el artista plástico Miguel Ángel Marchionni avanza en la remodelación de las molduras de los techos, la carpintería y los herrajes.

Rolando Baldasso, ministro de Infraestructura, destacó que “la remodelación de la Mansión Stoppel pone en discusión la necesidad de respetar el patrimonio histórico y cultural de la provincia de Mendoza”.

Hasta el momento, los especialistas han eliminado todas las construcciones precarias que se levantaron en el fondo de la casa, que nada tienen que ver con la obra original, y comenzaron con las excavaciones para levantar un nuevo edificio anexado a la antigua casona. Esta edificación adicional será moderna, pero con líneas arquitectónicas compatibles con la Mansión, y será donde se dispondrán las salas administrativas y de exposición para diversos artistas mendocinos, siendo que las pinturas de Carlos Alonso se ubicarán en el interior de la casa.

A su vez, comenzó también una de las tareas más complejas de la intervención, que es identificar los lugares estratégicos donde colocar columnas sismo-resistentes y así adaptar la construcción a los nuevos códigos antisísmicos que maneja la provincia.

Por otro lado, los restauradores explicaron que han avanzado un 30% con la recuperación y puesta en valor de los diferentes bienes y elementos que tiene la casa, como las ornamentaciones, puertas, molduras, vitraux, escaleras y herrería. “En cada intervención que hacemos siempre tratamos de mantener como premisa la recuperación de los elementos originales por el valor patrimonial que tienen”, indicó Marchionni.

La mansión, construida en 1912 por el italiano Víctor Barabino, se convirtió en la vivienda de Luis Stoppel, cónsul de la República del Perú en Mendoza, y en diciembre de 2002 se la declaró Patrimonio Cultural.

A mediados de abril de 2012, se sancionó la Ley Nº 7.371 que dispone la transferencia del inmueble de dominio público municipal a la órbita provincial. De esta forma, se le restituyó al Gobierno de Mendoza la tarea de restauración de la vivienda para dotarla de uso cultural.