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Jóvenes en contexto de encierro recibieron al Festival Va Poesía


El programa “Mendoza sin márgenes” presentó el Festival Va Poesía en la Dirección de Responsabilidad Penal Juvenil (DRPJ) donde los jóvenes compartieron una jornada literaria con escritores y poetas de Argentina, Costa Rica y Colombia. Esta iniciativa continuará visitando instituciones en distintos puntos de la provincia con el objetivo de propiciar espacios de expresión y comunicación a través de la literatura. Esta es la tercera edición y desde que inició se ha realizado en la provincia de Mendoza con el apoyo del Ministerio de Desarrollo Social y Derechos Humanos.

El festival lleva la poesía a escuelas y comunidades alejadas de los centros urbanos o en situación de vulnerabilidad, a centros de detención y comunidades de pueblos originarios, ya que su eje toma a la literatura como una herramienta de inclusión social.

El corredor cultural nace en México en 1994, concebida como un corredor cultural que recorre distintos países de Latinoamérica llevando la literatura a lugares en situación de riesgo social, penales, escuelas rurales, etc.

Marta Miranda, coordinadora de la iniciativa, sostuvo: “Vamos a sitios donde hay personas en situación de vulnerabilidad, donde generalmente este tipo de acontecimientos no sucede. La dinámica de este encuentro no es enseñar algo,  sino compartir con la gente. Este año hemos tenido lecturas espontáneas, chicos que ya traían alguna producción. Antes no habíamos producido nada in situ, pero esta vez decidimos implementar talleres  con la idea de que quede un registro escrito”.

“La idea es acercarlos a la literatura y después que las instituciones continúen el proceso hasta llegar a la producción, para luego ver como lo hacemos circular:  lo más importante de esto, es que buscamos que las personas recuperen la voz en sitios que no la tienen, y esa voz llegue a todas partes”, finalizó.

A su vez, Luis Miguel Rivas, narrador colombiano, realizó una crónica del  proceso y a dictar talleres. “Para mí ha sido conmovedor que la poesía llegue a la gente y que la sienta como una manera de estar en la vida y no como palabras dichas por gente culta. Como en el caso de estos chicos: el sentir la poesía como una esperanza, como una demostración de que no están condenados”.

“La escritura –acotó Rivas- es algo que podés hacer con tranquilidad, sin necesidad que un escritor sea un personaje en abstracto. Lo maravilloso es que de pronto los chicos se animen a escribirse, y encontrar caminos a través de la escritura y la lectura”.

Por su parte, Isaac Morales, director del DRPJ, manifestó: “Tratamos de que los jóvenes descubran sus talentos y que esto los motive a seguir educándose, y que ellos puedan ver su vida proyectada hacia otras situaciones distintas de  la vida que han venido llevando y el contexto que ellos conocen”.

Alberto Contreras, jefe de internación del DRPJ, indicó: “Desde hace tres años que se viene trabajando en talleres literarios, y es a través de estos encuentros  que nosotros recuperamos experiencias de los chicos  que por ahí no cuentan en otros espacios y se pueden trabajar  desde lo terapéutico”.

El festival comenzó sus talleres el lunes y durante la semana recorrerá diferentes dependencias y escuelas. El jueves estarán en la Unidad Penal III en el Borbollón, y en la Unidad Penitenciaria de Boulogne sur Mer, mientras que el viernes concluirán las actividades en el departamento de General Alvear.