Estado de las rutas y el tiempo en Mendoza

Más de 200 docentes mendocinos se capacitaron en el programa Formador de Formadores


Por el trabajo conjunto entre la Unidad Ejecutiva de Seguridad Vial dependiente del Ministerio de Transporte, la Dirección General de Escuelas y Sancor Seguros, en el mes de junio comenzaron las jornadas de capacitación docente en materia de Seguridad Vial.

Se dictaron los talleres en colegios del Gran Mendoza y San Rafael destinados a docentes del nivel inicial. Este programa de capacitación “Formador de Formadores” nació con el propósito de ayudar a los maestros a profundizar su conocimiento tanto en esta materia como en la prevención de siniestros.

El ministro de Transporte, Diego Martínez Palau, planteó su intención para generar un cambio cultural: "Tenemos que generar políticas de estado que se construyen entre todos los actores de la sociedad y un agente importante de este proceso son los docentes que están a cargo de educar a nuestros hijos”. Y continuó: “Estamos felices de ser parte de este programa de formación docente”.

Es importante destacar que el Programa de capacitación fue declarado de interés legislativo. Los destinatarios fueron 200 docentes de nivel primario ya que son el puente que permite trasladar nociones importantes a los alumnos en las aulas.

La Directora de la Unidad Ejecutiva de Seguridad Vial, Marisa Garnica, expresó acerca del resultado de la capacitación: “No sólo hemos aprendido contenido sino que hemos podido incorporar experiencias que las hicimos propias para poder convivir y circular por las calles de la provincia”.

El dictado y conducción de las clases estuvo a cargo del doctor Botta Bernaus, uno de los referentes en Argentina en materia de tránsito, prevención de accidentes, educación y seguridad vial.

La capacitación otorgaba  0,2625 de puntaje docente a todos aquellos que cumplieran las 70 horas estipuladas. Además de una evaluación final en la cual se entregaba un proyecto para el aula.

Hoy, la seguridad vial es un tema de central importancia. Por ello las prácticas sociales responsables, de respeto hacia el prójimo y a la vida humana en sí misma, se alcanzan con mucha mayor efectividad si la educación acompaña esas premisas desde los primeros años de vida.