Megajuicio: “Espero con ansias Justicia y saber cuál fue el destino de mi esposo”.

Los testigos Alfredo Saieg, Rosario Evangelina Quiroga, Olga Salvucci y Horacio Antonio Leceta prestaron testimonio en la segunda audiencia prevista para esta semana, en el IV Juicio por delitos de lesa humanidad.

Alfredo Saieg declaró sobre el secuestro y posterior desaparición de su esposa Olga Inés Roncelli.

Olga era docente en la Escuela Superior de Magisterio, militante del Partido Obrero e integrante del sindicato de la institución cuando el 13 de septiembre de 1977 no llegó a su casa tras salir del trabajo. Ante esto, Alfredo radicó la denuncia correspondiente en la comisaría 7ma de Godoy Cruz y ante la inexistencia de respuestas, presentó dos habeas corpus al Juzgado Provincial. “No tuve respuesta alguna, por eso hice gestiones ante la Cruz Roja Internacional, Organismos de Derechos Humanos, envié notas a los Comandos de las tres fuerzas armadas y tomé contacto con familiares de personas desaparecidas”, relató al Tribunal y agregó: “Nunca tuve información sobre el paradero de mi esposa”.

El testigo relató hechos preliminares a la desaparición de Olga. Recordó un viaje a Italia en 1975, ocasión por la cual dejaron a una pareja amiga al cuidado del departamento del matrimonio Saieg Roncelli, ubicado en el Barrio Trapiche de Godoy Cruz. “Mientras estuvimos de viaje, realizaron un allanamiento en nuestra vivienda; con el tiempo supe que la pareja pertenecía a Montoneros”, declaró Saieg que recordó otros episodios en los que eran perseguidos por vehículos pertenecientes a las fuerzas militares. “Cuando Olga desaparece, los vehículos no aparecieron más”, expresó Alfredo sobre el caso de su compañera, incluido en el informe “Nunca Más” de la Conadep.

Desde la Embajada argentina en Caracas declaró vía videoteleconferencia, Rosario Evangelina Quiroga sobre el secuestro y desaparición de su esposo José Luis Herrero.

El matrimonio Quiroga Herrero militaba en Montoneros; José Luis representaba al Partido Auténtico. Junto a sus 3 hijas vivían en San Juan cuando a fines de 1975 su vivienda fue violentamente allanada. “Dada estas circunstancias José Luis viajó a Mendoza para buscar una vivienda y así trasladarnos con nuestras hijas”, expresó la testigo que prosiguió relatando sobre un segundo operativo policial, esta vez realizado el 9 de marzo de 1976 en la pensión donde se alojaba José Luis. Tras esto, nunca más se tuvo conocimiento sobre su paradero.

Respecto a los habeas corpus presentados ante la Justicia Provincial, la testigo señaló a los exjueces Rolando Evaristo Carrizo y Luis Francisco Miret entre quienes labraron dictámenes negativos. Finalizó su testimonio al expresar: “Espero con ansias justicia y saber cuál fue el destino de mi esposo”.

En cuanto a la declaración prestada por Olga Salvucci, la testigo relató episodios previos a su detención ilegal.

Olga, oriunda de Bahía Blanca (Buenos Aires), era estudiante de Bioquímica en la Universidad Nacional del Sur, presidenta del centro de estudiantes de esa institución e integrante de la Coordinadora de Movimientos de Ayuda a Chile (Comochi). Junto a su pareja, Horacio Antonio Receta – estudiante de Geología- militaba en el Partido Comunista.

En 1975 Olga y Horacio contraen matrimonio; Horacio se recibió de geólogo e ingresó a trabajar en YPF. Por razones laborales, la pareja se trasladó a nuestra provincia, al departamento de Malargue.

El 29 de julio de 1976 – a sólo 6 meses de instalarse en Mendoza – Olga quedó  detenida ilegalmente al llegar a la casa de unos compañeros militantes que estaba siendo allanada. Fue traslada a la Comisaría 4ta para posteriormente ser trasladada al centro clandestino de detención de mujeres ubicado en el Casino de Suboficiales. “Allí había otras detenidas en las habitaciones del lugar, entre ellas Cora Cejas y Vilma Rúpolo; En las noches a ciertas detenidas nos vendaban los ojos y nos subían a camionetas para llevarnos a los interrogatorios”, expresó Olga al relatar en detalle sobre las sesiones de tortura padecidas bajo picana eléctrica.

A los 2 meses fue trasladada a la Penitenciaría Provincial hasta fines de diciembre, y finalmente a Devoto donde quedó a disposición del Poder Ejecutivo Nacional hasta recuperar la libertad, el 14 de marzo de 1977.

“Durante mi detención nunca me informaron porqué estaba detenida, ni sobre ninguna causa judicial en mi contra”, expresó Olga.

Sobre este caso declaró Horacio Antonio Leceta que aportó detalles a la declaración brindada por su esposa. “Durante los meses que mi esposa estuvo detenida, presenté habeas corpus y denuncié la tortura a la que fue sometida”, declaró Horacio y agregó: “Era una formalidad presentar habeas corpus porque nunca tuvimos una respuesta”.

Tras este último testimonio, la etapa testimonial continúa el próximo lunes 01 y martes 02 de junio a las 9.30 en el primer piso de Tribunales Federales.