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Mendoza y Córdoba coordinan acciones para mejorar la gestión de los recursos hídricos.


José Luis Álvarez, titular del Departamento General de Irrigación (DGI), y el ministro de Agua, Ambiente y Servicios Públicos de la provincia de Córdoba, Fabián López, firmaron un convenio de cooperación mediante el cual se brindará apoyo institucional, técnico, académico y administrativo en todas las acciones relativas al desarrollo de la Gestión Integrada de los Recursos Hídricos (GIRH).

Las instituciones promoverán la colaboración a través de una amplia gama de estrategias, las cuales, incluirán: capacitación a personal de consorcios de riego y a pequeños o medianos productores en aspectos tecnológicos ligados al acceso, almacenaje, distribución y gestión del agua en los sistemas productivos y en la adquisición de equipamiento, materiales y herramientas necesarias para llevarlas a cabo.

Estudios específicos de prospección de recursos hídricos, manejo de cuencas, obras de perforación y almacenamiento, y para la adquisición de equipamiento destinado a tal efecto.

Las acciones se realizan con financiamiento del Gobierno Nacional.

Áreas específicas de trabajo

Red de Telemetría para la determinación, medición y análisis de acuíferos, napas freáticas, ríos, arroyos, canales, diques y efluentes industriales, a través del sistema MIDO (Modelo de Indicadores de Distribución Operativa.).

Capacitación a Usuarios y Organizaciones de Usuarios de Córdoba: será a través del intercambio de experiencias y acciones en conjunto con las Inspecciones de Cauce de la Provincia de Mendoza, para generar una vinculación directa entre los mismos productores organizados en torno a la administración del agua. Incluye el equipamiento necesario para tales actividades.

Capacitación e intercambio con personal dependiente del Ministerio de Agua, Ambiente y Servicios Públicos de Córdoba: se realizará a través de talleres e intercambios sobre líneas de trabajo de desarrollo para la instalación de capacidades institucionales, como Plan Agua 2020, intercambio de acciones ejecutadas, como el Proyecto Ciudadanía del Agua y Aqualibro, tendientes a la vinculación de la educación con la producción y el trabajo.