Lunes 29 de abril: suspensión de clases presenciales en San Rafael, Malargüe, Tupungato, Manzano Histórico y Potrerillos

Personal de DINAF participó en una jornada sobre el Derecho del Niño a ser Oído


Se realizó un taller dirigido al personal de DINAF a fin de capacitarlo en el “Derecho de los niños, niñas y adolescentes a ser oídos y que su opinión sea tenida en cuenta. Aspectos legales y psicológicos”.

En tanto que este concepto de escucha activa por parte de las instituciones es un eje central en el ejercicio de los derechos ciudadanos de los chicos, se vincula con su derecho a la participación, en el marco de la protección integral.

La capacitación apuntó a repensar las prácticas institucionales a partir de la experiencia de una integración de los chicos sin cuidados parentales. En la jornada se abordaron nuevas lógicas de intervención como son por ejemplo, la integración de estos espacios de convivencia en la propia comunidad en la que se desarrollan.

Este hecho plantea todo un desafío sobre el que los propios niños tienen algo para decir y es obligación de las instituciones prepararse para que su opinión pueda ser tenida en cuenta como un aporte positivo, lejos de los prejuicios y la asimetría de poder entre adultos y los más chicos.

Esta es la segunda jornada del año sobre el tema y en ella participaron alrededor de 50 profesionales que trabajan en los programas de Medidas Excepcionales (Hogares) y Apoyo Familiar (familias alternativas).

La Directora de Restitución de Derechos, Verónica Bertolotti destacaba que “la escucha de sus intereses y sus sentires, nos sirve de estímulo para que nuestras acciones y políticas sean más efectivas y justas”.

“El derecho a ser oído hoy debe ser resignificado en escucha activa de manera de que se transforme en un diálogo que concluya en una solución para aquel derecho que el niño está reclamando y pueda llegar a ser vulnerado”, aportaba por su parte el Defensor General de Derechos, Javier López Maida

El derecho a ser escuchado es un derecho complejo y uno de los más difíciles de ser ejercido y garantizado. El motivo es que este es uno de los derechos que interpela e incomoda al mundo adulto y su concepción adultocéntrica. Sin embargo este derecho no sólo reconoce a los niños como sujetos de derecho, sino que además los coloca en un plano de igualdad en cuanto a sus saberes, experiencias y opiniones respecto de situaciones que afectan su propia vida, historia y ejercicio ciudadano.

“Estas iniciativas nos llevan a plantearnos cómo, a partir de esta reflexión y de esta toma de conciencia, nos damos el desafío de modificar nuestras estrategias y abordajes metodológicos”, concluyó Cecilia Pallucchini, Directora de DINAF.