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Se abrieron las compuertas de la presa Potrerillos para tareas de mantenimiento


La maniobra estaba programada desde junio. Los objetivos son controlar y reducir la cantidad de sedimento acumulado y limpiar el descargador de fondo.

Un nuevo operativo de limpieza del descargador de fondo (DDF) de la presa Potrerillos realizó con éxito la Dirección de Hidráulica del Ministerio de Planificación e Infraestructura en conjunto con la empresa concesionaria Cemppsa, Aysam, Irrigación, ORSEP, Municipalidad de Luján y Maipú, Secretaría de Ambiente y Defensa Civil.

“Hemos podido comprobar la cantidad de sedimento que salió. La maniobra ha dado buenos resultados, aunque los datos certeros los vamos a tener muy pronto”, indicó el ministro de Planificación e Infraestructura, Mario Isgro.

La operación principal demandó dos horas de apertura de las compuertas del DDF. Los resultados finales estarán en unos días, cuando se termine una nueva inspección de sedimentos en el órgano de seguridad.

Además, Isgro agregó: “Pedimos a la población cuidar el agua, porque podría haber alguna baja. El año pasado hicimos la misma maniobra y no tuvimos inconvenientes, pero es mejor prevenir. La apertura se hace en esta época del año porque los chicos no están en las escuelas, estamos en la corta anual de agua para riego y por las bajas temperatura hay menos requerimiento del suministro”.

Liberar sedimentos para mantener la seguridad de la presa

Garantizar el correcto funcionamiento de todos los componentes del dique Potrerillos es el objetivo principal de las maniobras que se realizan en la presa. La finalidad es liberar sedimentos y material sólido que se acumula en el descargador de fondo y que provoca la disminución del volumen útil del embalse.

El descargador de fondo es uno de los componentes principales que tiene el dique Potrerillos y está diseñado para permitir el vaciado rápido del embalse desde su nivel máximo hasta la mitad de la altura en un tiempo máximo de 10 días.

Además, puede desalojar sedimentos en suspensión cuando se detecten avenidas de agua barrosa, a fin de evitar su asentamiento y consolidación en el sector aguas arriba de la embocadura y, así, prevenir su obstrucción.

También permite abastecer las demandas de agua urbana y de riego, en caso de salir de servicio el sistema de aducción.