El deporte intramuros y su función resociabilizadora


El reacondicionamiento de espacios deportivos, y la participación de reconocidos deportistas mendocinos, forman parte del programa impulsado desde el Servicio Penitenciario provincial para fomentar actividades saludables dentro de los penales.

Autoridades del Servicio Penitenciario, informaron que luego de la creación formal del Área de Deportes, perteneciente a la Coordinación de Tratamiento, se comenzó a trabajar fuertemente para que las prácticas deportivas, se conviertan en una herramienta fundamental en el proceso de resociabilización que llevan adelante las personas privadas de libertad.

De esta manera, “las canchas” ubicadas dentro de los complejos y unidades han ido transformándose para dejar de ser un mero espacio de pasatiempo y convertirse en lugares destinados a la práctica formal de deportes específicos, que favorezcan

Hasta el momento, el programa más reconocido es el que se viene aplicándose en el Complejo Almafuerte, en donde se formaron “Los Caciques”, el primer equipo de rugby de la provincia formado íntegramente por internos alojados en el penal de Cacheuta. Estos, han recibido el apoyo de distintas instituciones y rugbiers de la provincia, quienes han capacitado incluso al personal penitenciario para que esta actividad pueda replicarse y expandirse en otros lugares.

Por su parte, la unidad de Jóvenes Adultos también ha avanzado en este sentido, ya que en el último tiempo, ha recibido la visita de reconocidos boxeadores de la provincia como Jonathan Barros, el “Cotón” Revecco y Pablo Chacón. Aquí, el objetivo se ha centrado principalmente, en que sean los propios protagonistas quienes le cuenten a  este sector de la población penal, sus vivencias y la importancia que tuvo la práctica deportiva para evitar la droga y vida delictiva.

Es importante destacar que en este caso en particular, se trata de internos que tiene entre 18 a 21 años, por lo que el acompañamiento debe ser aún más pedagógico. Es por este motivo que, Pablo Chacón, decidió donar una importante cantidad de materiales para armar una especie de gimnasio, y se comprometió a enseñarles este deporte que les permita fundamentalmente fijar reglas y disciplina.

“Para poder participar de este programa los chicos van a tener buena conducta no sólo en el playón deportivo, sino también en su lugar de alojamiento. El boxeo es un deporte que tiene mucha disciplina y respeto, para con los compañeros, los profesores y las autoridades, por lo que creo que puede ser muy útil en un espacio como este”, explicó Chacón.

Vóley, fútbol y hockey para las mujeres

La inclusión de las prácticas deportivas, han tenido también su crecimiento en las Unidades carcelarias para el alojamiento exclusivamente de mujeres. En el caso de la caso de El Borbollón, se está promocionando la práctica de hockey sobre césped y el vóley, a medida que se van acondicionando los espacios para que puedan tener las comodidades necesarias y de esta manera, ampliar en número de internas que participen.

Otro de los deportes que ha tomado fuerza dentro de la Unidad es el fútbol femenino, esto ha ido creciendo gracias a la visita de planteles como Huracán y el CEC (Centro de Empleados de Comercio) quienes se acercaron para compartir partidos amistosos y hacer además donaciones de juegos de camisetas y pelotas.

Incluso el Gobernador Alfredo Cornejo se refirió a este tema durante su discurso del 1 de mayo en la Legislatura provincial al referirse al tema de la significativa  disminución de la violencia dentro de las cárceles, y le atribuyó este logro, no sólo al personal penitenciario sino también a la mejora en las actividades que los internos realizan más allá del estudio y el trabajo, “está comprobado, y esto puede verse en los registros, que las personas que realizan deportes en contextos de encierro, tienen un nivel de reincidencia muy bajo”, informó el gobernador.

Por su parte, Manuel González, Jefe del Área de Deportes explicó que actualmente, todos los profesores que conforman el equipo, se encuentran trabajando en la promoción de actividades para el personal penitenciario y para las personas privadas de libertad, con el objetivo de que  todos puedan mejorar su calidad de vida, mediante la incorporación de hábitos para una vida sana, física y mental.