El Servicio Penitenciario promueve el cuidado de la salud de las mujeres
A través de iniciativas generadas por la Unidad 13 “Gestión de Salud Penitenciaria”, la institución que nuclea los penales de la provincia impulsa a que tanto las mujeres privadas de libertad, como su personal, se realicen estudios ginecológicos.
En el marco del “Mes de la Mujer”, el Servicio Penitenciario de Mendoza, junto con el Área de Salud Sexual y Reproductiva de la provincia, y el laboratorio de Anatomía Patológica de la Casa de la Mujer, están llevando a cabo diversas propuestas que apuntan al cuidado de la salud femenina.
En este sentido, la Unidad Penal Nº 3, que aloja a mujeres que se encuentran privadas de libertad, cuenta con una médica ginecóloga. Esto permite que, en contextos de encierro, las internas puedan acceder a realizarse estudios de papanicolaou, colposcopía, HPV, y la colocación de dispositivos intrauterinos,
Asimismo, desde el área de salud, informaron que están llevando a cabo testeos de enfermedades de transmisión sexual, y se ofrecen preservativos femeninos y masculinos, utilizados como método anticonceptivo y para disminuir la posibilidad de contraer infecciones.
Iniciativas para mujeres penitenciarias
A su vez, desde la Unidad Nº 13 Gestión de Salud Penitenciaria, se están realizando acciones para impulsar a que el personal femenino que cumple funciones en la Zona Centro y Oeste de la provincia, obtenga de manera rápida y eficiente, las órdenes para sus estudios ginecológicos.
Es importante destacar que, desde hace años el Servicio Penitenciario adhiere también a la Ley Nº 8792, la cual establece un día laboral por año, a favor de toda mujer mayor de dieciocho años que preste servicios en el sector público provincial, con el fin de someterse a exámenes de colposcopía, papanicolau y mamografía.
Programa provincial de salud reproductiva
El programa provincial de salud sexual y reproductiva comenzó a funcionar en 1998, después de la sanción de la Ley 6433. El abordaje de la temática se realiza no sólo desde la óptica de la salud, sino también desde la complejidad y el desafío que plantean los derechos sexuales y (no) reproductivos, y la perspectiva de género.
La misión de este programa es promover el acceso a la información, para lograr el ejercicio pleno de la sexualidad con cuidado de la propia salud.
Por todo esto, la ginecóloga del Servicio Penitenciario de la provincia se encarga también de brindar capacitaciones, de las cuales pueden participar no sólo las mujeres privadas de libertad sino también el personal, para la concientización y detección temprana del cáncer de cuello de útero.
