Guía de Prevención, Diagnóstico, Tratamiento y Vigilancia Epidemiológica de los Envenenamientos por Ofidios


Guía de Prevención, Diagnóstico, Tratamiento y Vigilancia Epidemiológica de los Envenenamientos por Ofidios. Edición 2014

PRÓLOGO a modo de introducción

En nuestro país se reportan anualmente alrededor de 1.000 envenenamientos ofídicos (Dolab et al., datos 1978-1998), con una mediana de 5 (rango 2-7) defunciones (datos DEIS, 1994-1998). Esta baja tasa de letalidad está muy probablemente relacionada con la accesibilidad al tratamiento específi co que, cuando fue evaluado, mostró que en más del 90% de los casos fue administrado antes de las 4 horas posteriores a la mordedura. Sostener y aún mejorar esta situación es un desafío permanente para el sistema de atención de la salud.
En Argentina se han descripto 136 especies/sub-especies de ofi dios, de las cuales 18 pueden producir envenenamiento. Entre las conocidas como “yarará” se registran en el país Bothrops alternatus, B. diporus, B. ammodytoides, B. jararaca, B. moojeni, B. jararacussu, B. cotiara, B. jonathani, B. matogrossensis y B. neuwiedi; de las “víboras de cascabel” existe una sola especie: Crotalus durissus terrifi cus (ambos grupos Viperidae:
Crotalinae), mientras que de las “serpientes de coral” se encuentran Micrurus altirostris, M. balyocoriphus, M. corallinus, M. frontalis, M. pyrrhocryptus, M. lemniscatus y M. silviae (Elapidae: Elapinae) que, colectivamente, cubren casi toda la superfi cie continental del país.
Aunque se notifican envenenamientos ofídicos en 22 de las 24 provincias del territorio nacional, estos presentan una distribución geográfi ca heterogénea asociada a la diversidad climática, topográfi ca y al nicho ecológico de cada especie. La probabilidad y gravedad del envenenamiento en relación con el género de ofi dio involucrado,
depende del tamaño del ejemplar, dentición (Crotalinae solenoglifodonte, Elapinae proteroglifodontes) y composición del veneno (Bothrops cuadro hemohistotóxico con lesiones locales y complicaciones sistémicas, Crotalus cuadro neurotóxico y miotóxico con potencial compromiso renal, Micrurus cuadro neurotóxico).
Estudios previos han identifi cado a Bothrops como responsable del 96,6% de las mordeduras, con cifras signifi cativamente inferiores para Crotalus (2,8%) y Micrurus (0,6%).
Los emponzoñamientos o envenenamientos provocados por las mordeduras de serpientes venenosas de los tres géneros son eventos potencialmente graves y letales, pero prevenibles y tratables. Se trata de intoxicaciones agudas, que constituyen una emergencia médica para la que existen antídotos efectivos.
Para la efectiva utilización de los antivenenos específi cos es necesario que los miembros del equipo de salud conozcan el cuadro clínico, sepan reconocer al animal agresor e instauren precozmente las medidas de sostén y tratamiento específi co (antiveneno) para prevenir las complicaciones y secuelas.
Nuestro país produce los sueros antiofídicos y cuenta además con Centros Especializados en Venenos Animales, personal altamente capacitado en el diagnóstico, tratamiento, prevención y vigilancia epidemiológica de estas intoxicaciones, así como con Centros de Información, Asesoramiento y Asistencia Toxicológica que conforman
la Red Argentina de Toxicología.

Guía Diagnóstico y Tratamiento Envenenamiento Ofidios

Para más información

Centro de Información, Asesoramiento y Asistencia Toxicológica