Manual de Bioseguridad para Establecimientos de Salud – Capítulo 08 Normas y Recomendaciones de Bioseguridad En Quirófanos
CAPITULO VIII
Dra. Koch, Adriana
NORMAS Y RECOMENDACIONES DE BIOSEGURIDAD EN QUIROFANOS
INTRODUCCIÓN
Como complemento a lo expuesto en el capitulo Normas y Recomendaciones de Bioseguridad en Areas Criticas y Salas de Internacion General, la Infeccion de herida quirurgica es la causa mas frecuente de infección hospitalaria en los pacientes quirúrgico y es responsable del aumento de la morbilidad y mortalidad quirúrgica. Su génesis es multifactorial por lo que se expondrán una serie de medidas demostradas para dismunir su incidencia.
1) Lavado de manos quirúrgico (Ver Capitulo Higiene de manos)
2) Preparación de la piel del paciente en el quirófano
Antes de preparar la piel para el procedimiento quirúrgico hay que asegurar que esta ha quedado limpia de toda contaminación macroscópica.
Actualmente se recomienda realizar la preparación de la piel con clorhexidina solución al 2 % o con clorhexidina 0,5 – 1 % en base alcohólica (alcohol etílico o isopropílico al 70 %).
Tanto la clorhexidina como la iodopovidona son agentes de amplio espectro germicida. La actividad residual lograda por la clorhexidina es superior y presenta como ventaja el no resultar inactivada ni por la sangre ni por proteínas séricas como ocurre con la iodopovidona.
La preparación preoperatoria de la piel en el quirófano consiste en la aplicación del antiséptico elegido, usando elementos estériles y guantes o mediante la técnica de “no tocar”. La OMS (Organización Mundial de la Salud) en un documento publicado en Junio 2008, señala que la aplicación del antiséptico se realiza moviéndose desde la zona donde se practicará la incisión hacia la periferia de la misma (extendiéndose lo suficiente como para abarcar también las zonas donde pueden ubicarse los drenajes).
El pasaje del agente antiséptico se realizará mediante fricción y durante tres veces consecutivas. La preparación preoperatoria y los antisépticos a utilizar pueden modificarse en dependencia de las condiciones de la piel (por ejemplo pacientes quemados) o de la localización del sitio quirúrgico (por ejemplo la cara).
3) Vestimenta quirúrgica
Toda persona que ingrese al sector de quirófanos debe hacerlo a través de los vestuarios para colocarse un ambo. La camisa debe usarse dentro del pantalón. El número de biopartículas que se esparcen en el ambiente es directamente proporcional a la cantidad de piel y cabello expuestos.
Cuando esté visiblemente sucia o manchada, la vestimenta quirúrgica debe ser reemplazada por otra tan pronto como sea posible, ya que cuando simplemente se humedece, favorece el pasaje de microorganismos provenientes de la piel de los operadores hacia el campo operatorio y aumenta la posibilidad de contacto del personal con material potencialmente infectado.
Los camisolines estériles se utilizan para crear una barrera antiséptica entre el sitio de la incisión quirúrgica y posibles fuentes de bacterias. Deben estar reforzados en pecho y mangas, contar con puños elastizados y sujetarse hacia delante o hacia el costado (modelo envolvente). Si son de tela, debe asegurarse que no presenten roturas que expongan la piel del operador con el campo quirúrgico. Los camisolines estériles son clasificados como descartables, hemorrepelentes (de un solo uso) o como reusables, de múltiples usos.
Los gorros y capuchas reducen el desprendimiento de microorganismos desde el cabello y el cuero cabelludo.
Los barbijos quirúrgicos deben ser descartables, contar con tres capas, triple tableado y tiras ubicadas en forma vertical, hacia arriba y hacia abajo (las dos tiras superiores se atan en la parte superior de la cabeza y las dos tiras inferiores a la altura de la nuca). Las tiras ubicadas en posición horizontal (hacia los costados) favorecen que se formen ángulos al sujetar el barbijo, que permiten la salida de microorganismos del personal hacia el campo quirúrgico y a su vez exponen al operador al contacto con salpicaduras accidentales.
El uso de cubre zapatos es a los fines de protección del calzado del operador no habiéndose demostrado disminuir la incidencia en la infección del sitio quirúrugico.
El equipo quirúrgico utilizará protección ocular (antiparras o anteojos protectores con ajuste lateral) mientras permanezca en el quirófano propiamente dicho.
Anestesistas y técnicos y / o ayudantes de anestesia
Los anestesistas y los técnicos de anestesia realizan procedimientos invasivos (catéter intravascular, intubación endotraqueal, administración de soluciones intravenosas) y trabajan cerca del campo quirúrgico estéril, lo que hace imperativo que ellos se adhieran estrictamente a las recomendaciones de control de infecciones. Deben llevar ambo de uso exclusivo en el quirófano, además de las otras recomendaciones habituales como gorro, gafas, y barbijos adecuadamente colocados.
Instrumental quirúrgico
Cuando una caja es abierta se considera contaminada, aún si la extracción de instrumental se realizó con técnica aséptica. No está permitido sumergir instrumental en agentes químicos desinfectantes. El instrumental quirúrgico se considera un elemento crítico ya que penetra en cavidades, tejidos estériles y torrente sanguíneo. Por tal razón, el único método de reprocesamiento permitido es la esterilización. (Ver capítulo de esterilización).
MEDIO AMBIENTE DE QUIRÓFANOS
Características de la planta física de quirófanos
El quirofano es un entorno aséptico equipado de aparatos médicos y es de uso exclusivo de los equipos de anestesia y cirugía y no deben utilizarse para otros fines.
Debe ser un área limpia, fácil de limpiar, con claros lineamientos sobre circulación.
El área libre comprende la zona de ingreso del personal (vestuarios y baños), ingreso de pacientes, intercambio de camillas (zona de transferencia), área de depósito de suministros, Sala de Estar para el personal, Sala de Preanestesia , Sala de Recuperación Anestésica
El área semirrestringida abarca los pasillos de circulación internos, Piletas de lavado y preparado del material, depósitos de material limpio y equipos.
equipo para procedimientos y sitios para conservación de muestras bacteriológicas de los pacientes (heladera), las cuales deben ser rotuladas adecuadamente
El personal ya debe estar vestido con ropa especial de quirófano la cual debe ser limpia no estéril.
El material estéril debe guardarse en depósitos y dentro de armarios cerrados. Las estanterías deben ser de metal, acrílico u otro material que permita una fácil limpieza.
El acopio de materiales necesarios para la cirugía debe realizarse antes de la iniciación del acto quirúrgico, a efectos de minimizar la apertura de puertas y evitar turbulencias en el aire.
El área restringida está constituida por los quirófanos propiamente dichos y la zona de piletas para el lavado de manos.
El sector para el lavado de manos debe contar con piletas profundas, 0,40 mts. de profundidad y el filo o borde superior a un metro del piso para minimizar el riesgo de salpicaduras, deben ser exclusivas para tal fin, ya que cuando se destinan a otros usos, como lavado de elementos de limpieza o instrumental quirúrgico, aumentan los riesgos de contaminación. Desde este sector se debe acceder en forma directa a la sala de operaciones.
Las paredes deben estar pintadas con pinturas especiales que faciliten el lavado periódico con el mínimo deterioro posible (tipo Epoxi®). Los encuentros o aristas deben tener ángulos y zócalos sanitarios con radio mínimo de 10 cm. Los pisos deben ser compactos, no flotantes, con toda su superficie a nivel conformado con placas de tamaño mínimo de 0.50 por 0,50 m. para tener cantidad menor de juntas. Las mismas deben ser selladas con material granítico o vinílico, no cemento. Los cielorrasos o techos no se lavan, deben ser pintados periódicamente (pintura epoxi o poliuretano).
El quirófano debe contar con buena iluminación y ventilación, sin ventanas al exterior.
Ventilación: El quirófano debe contar con presión positiva en su interior que evita el ingreso del flujo de aire proveniente de áreas adyacentes menos limpias. El nivel microbiano del quirófano es directamente proporcional al número de personas moviéndose dentro del mismo, lo que obliga a limitar el tránsito tanto como sea posible.
El quirófano debe ser climatizado por medio de un sistema de ventilación con filtros absolutos y previsto de un sistema de renovación del aire por el que sale una cantidad de aire inferior al aire nuevo que entra.La circulación del aire debe ser unidireccional ingresando cerca del techo y egresando cerca del piso Deberán contar con 2 filtros en serie, con una eficacia superior en el primer filtro al 30 % y en el segundo filtro al 90 %. Los filtros HEPA remueven partículas de 0.3 micrones de diámetro con una eficiencia del 99,97 %. Debe establecerse un sistema de monitoreo de los filtros que incluya su mantenimiento y reemplazo.
El número de recambios por hora es de 15, con 3 de aire fresco. Además, debe haber un eficiente sistema de evacuación de los gases de anestesia.
Para quirófanos donde se realicen transplantes de órganos y cirugías de ortopedia, o en casos de pacientes quemados, se recomienda el uso de sistemas de ventilación que cuenten con tres filtros en base y en serie de 25, 90 y 99,97 % de eficiencia.
Unidades re circulantes HEPA
El uso de estas unidades es común en hospitales para diluir y remover contaminantes. Consisten de un ventilador, un filtro HEPA y un pre filtro que están disponibles en diferentes configuraciones: portátiles, de techo o pared. Se utilizan para crear una presión negativa, positiva o limpiar el aire de la habitación. Su uso está recomendado por los CDC y el Estándar 170 para áreas críticas como habitaciones de aislamiento con pacientes de enfermedades contagiosas (Airborne Infection Isolation Rooms, AII), salas de urgencias o de tratamientos o procedimientos especiales. Las unidades purificadoras o re circulantes HEPA también se utilizan para habitaciones en las que se requiere proteger al paciente (Protective Environment Rooms, PE), tal es el caso de pacientes inmunospurimidos o que acaban de recibir un trasplante. (http://www.mundohvacr.com.mx/mundo/2011/04/8539/#sthash.na4iTrOV.dpuf)
Humedad y temperatura: La humedad relativa del quirófano debe ubicarse en un rango del 20 al 60%, dependiendo de la temperatura ambiente (ideal: 50 – 55 %). La temperatura debe estar entre los 20 y los 24 º C.
Se debe mantener todas las puertas de la sala de operación cerrada durante el procedimiento. Entre cada cirugía limpiar y desinfectar la superficies y el instrumental usado
No está justificada la toma de muestras microbiológicas del ámbito quirúrgico en forma rutinaria. Valores normales: 15 – 20 UFC por cada 30 cm 3de aire.
En cirugías de alto riesgo (transplantes, cirugía ortopédica) se debe obtener por cultivo bacteriológico no más de 1 UFC por cada 30 cm3 de aire.
BIBLIOGRAFÍA
1. World Health Organization, best practice protocol clinical procedure safety WHO/EHT/CPR 2004 reformatted 2007.
2. World Alliance for patient sfety. WHO guidelines for safe surgery. Geneva: WHO 2008.
3. Alex B. Haynes, MD. N Engl J Med 2009; 360:491-9.
4. Ministerio de Salud “ Guías para la Prevención y Control de las Infecciones Nosocomiales” Programa de Vigilancia de la Salud y Control de Enfermedades. 2004.
5. Taller y Documento de Consenso SADI-INE “Prevención de Infección del sitio quirúrugico y seguridad del paciente en el pre, intra y postquirúrgico”. 2009