Con una capacitación en Comunicación comenzó la Semana de Salud Mental
Bajo el lema “No es cosa de locos, es cosa de todos”, el Ministerio de Salud, a través de la Dirección de Salud Mental, organizó actividades para concientizar a la población sobre las problemáticas de salud mental, haciendo hincapié en la importancia de una construcción comunitaria y el compromiso de todos los sectores.
Esta mañana, en la Legislatura, la responsable del área de Comunicación de la Dirección de Salud Mental y Adicciones de Nación, Andrea Demasi, capacitó a más de 200 personas, entre periodistas y equipos de salud, en recomendaciones para el correcto tratamiento de estos temas en los medios de comunicación.
El presidente de la Cámara de Diputados, Jorge Tanús, agradeció al público presente y señaló que “la legislatura es el espacio propicio para realizar instancias de reflexión y debate y difundir todas las actividades relacionadas con la salud”.
Por su parte, el director de Salud Mental, Alberto Navarro, destacó que “durante toda la semana se sensibilizará a la población en el cuidado de la salud mental como un bien a construir. Hoy estamos acá trabajando sobre una comunicación responsable con comunicadores y estudiantes”.
“Uno de los principales problemas que abordamos es la estigmatización de los pacientes en situación de vulnerabilidad, por lo tanto estamos capacitando a la gente que comunica porque consideramos que nos va a ayudar a implementar las políticas sanitarias”, puntualizó Navarro.
Durante su exposición, Demasi abordó temas como salud mental y adicciones, suicidio y alcohol, haciendo referencia a la Ley Nacional de Salud Mental Nº 26.657.
“Estamos hablando de cómo tratar los temas de salud mental en los medios de comunicación y cómo involucrar a este factor tan importante como es la comunicación en la divulgación del nuevo paradigma, que es abierto, comunitario, respetuoso de los derechos humanos de todas las personas, porque sin dudas el rol de los medios es clave”, apuntó la funcionaria nacional.
Si bien en los últimos años hay avances en el tratamiento de los medios sobre la problemática, todavía de transmite a nivel general una imagen errónea y negativa del padecimiento mental, que afianza estereotipos, prejuicios y falsas creencias.
En este sentido, durante las dos horas de capacitación, la profesional explicó que “desde la comunicación uno de los principales desafíos es intentar no reproducir estereotipos de manera consciente o inconsciente en la presentación de la información”.
Para finalizar, Demasi aclaró que “sin dudas el sistema sanitario tiene un rol insoslayable que es el de la recuperación de la persona, pero en la prevención y la inclusión social, estamos todos”.
La semana continuará con jornadas de charlas y reflexión en las plazas de los departamentos. El objetivo de las acciones es trabajar para la inclusión social de las personas con sufrimiento mental (actividades laborales, educativas, etc.) a partir de abordajes comunitarios.
Ley Nacional de Salud Mental
La Ley Nacional Nº 26.657 tiene como fin asegurar el derecho a la protección de la salud mental de todas las personas y el pleno goce de los derechos humanos de aquellas personas con sufrimiento mental.
La norma define como Salud mental al proceso determinado por componentes históricos socioeconómicos, culturales, biológicos y psicológicos cuya preservación y mejoramiento implica una dinámica de construcción social vinculada a la concreción social de los derechos humanos y sociales de toda persona.
Establece que se debe partir de la presunción de capacidad de todas las personas. En ningún caso puede hacerse Diagnóstico en el campo de la salud mental sobre la base exclusiva: status político, socioeconómico, pertenencia a un grupo cultural, racial o religioso; demanda familiares, laborales, falta de conformidad o adecuación con valores morales, sociales, culturales, políticos o creencias religiosas prevalecientes en la comunidad donde vive la persona; elección o identidad sexual; la mera existencia de antecedentes de tratamiento u hospitalización.
La Ley pone énfasis en la atención de la comunidad. La internación sería una medida de última instancia y la misma debe realizarse en hospitales generales intentando que sea en el menor tiempo posible.
Además especifica que los equipos de profesionales tienen que ser interdisciplinarios. Se suman abogados para asesorar a las personas con sufrimiento mental y sus familias sobre sus derechos.
La Ley Nacional de Salud Mental prohibe la apertura de nuevos hospitales monovalentes psiquiátricos tanto públicos y privados y ordena que los ya existentes deberán modificar sus prácticas y adecuarse a los lineamientos de la nueva norma.