El especialista español Rafael Fuentes reflexiona sobre el Turismo en Mendoza


La semana pasada, el especialista visitó nuestra provincia para participar de diversos conversatorios y las IV Jornadas Nacionales de Turismo del Vino. A continuación, su repaso por la historia de la gestión turística en nuestra provincia.

El doctor Rafael Fuentes participó en el conversatorio “Universidad, Empresa y Estado. Trabajo colaborativo para crecer y generar destinos turísticos inteligentes”, que se realizó el 1 de noviembre en la UNCuyo. De las charlas con especialistas locales que se dieron cita en ese encuentro, surgieron las reflexiones que plasmó en el siguiente texto.

Mendoza: de los inicios a la actual realidad turística

Podemos remontarnos 150 años atrás, cuando empezaron a llegar los turistas a la Provincia de Mendoza, concretamente con la llegada del ferrocarril en 1885, que representó un fuerte cambio para la economía y la sociedad mendocina, impulsando el tráfico de mercancías y pasajeros. Posteriormente, podemos señalar otro hito importante, hace casi 100 años, con la aparición del primer Ente turístico de la Argentina, que fue el mendocino, fomentando el apoyo público hacia la actividad turística. En tercer lugar, podríamos destacar, el impulso a la actividad turística, en las décadas de los ochenta y noventa, cuando un grupo de apasionados prestadores mendocinos trabajaron duramente por desarrollar esta actividad en la Provincia.

Han sido cientos, miles, de hombres y mujeres quienes construyeron, con su esfuerzo, lo que hoy es la realidad turística mendocina.

No obstante, si tuviera que proponer un hito, a partir del cual se inició el desarrollo turístico de la Provincia, planificando su futuro y consolidando a la actividad turística en el papel protagonista que tiene hoy en la economía mendocina, ese sería la aparición del TurPlan, en el año 2000.

En ese año llegué por primera vez a esta preciosa Provincia, cargada de recursos turísticos inigualables y con unas gentes hospitalarias, que me atraparon desde el primer momento, y de las que sigo enamorado actualmente.

Recuerdo que tenía un sector turístico con muy baja apreciación por parte de los responsables políticos, por los medios de comunicación e incluso por la propia sociedad civil.

Recuerdo que no existía como destino estructurado, recuerdo las rivalidades entre zonas, recuerdo que solo abrían al turismo 2 bodegas (cuando hoy lo hacen más de 230 bodegas), recuerdo que no había establecimientos de 5 estrellas (cuando hoy los hoteles y alojamientos boutiques de mayor calidad están en la Provincia), recuerdo que la comercialización con turoperadores era casi inexistente, recuerdo que en demasiados municipios no había casi hotelería, ni recursos humanos formados para el turismo, ni se conocían los prestadores de alojamiento con los de turismo activo… y recuerdo que no existía presupuesto para acciones turísticas.

En aquel momento y aquella situación, hubo una iniciativa del Gobierno de la Provincia, acompañada de todo el sector turístico mendocino, que hizo que se construyera el camino de lo que hoy es uno de los destinos turísticos más competitivos del país.

El viernes pasado, al participar en una mesa de reflexión en la Universidad Nacional de Cuyo sobre “Los Retos Turísticos en Mendoza”, recordaba que fue el actual vicerrector de esa institución académica, Gabriel Fidel, quien tuvo la iniciativa de crear un espacio conjunto de desarrollo turístico, quien, junto a Mariana Juri, fueron los que hicieron un extraordinario trabajo interno (en su propio gobierno) y externo (con la sociedad mendocina) para planificar el desarrollo de la actividad turística. Sin apenas recursos económicos y técnicos diseñaron el camino de lo que hoy es una preciosa realidad.

Pero obvio que Gabriel y Mariana no hubieran tenido éxito, sin el acompañamiento de todo el sector turístico de la provincia.

Recuerdo el papel fundamental de Gabriela Testa, apoyando desde la Dirección de Turismo de la Ciudad de Mendoza y coordinando a todas las direcciones de turismo de los municipios. Recuerdo el perfecto trabajo técnico de Marcelo Reynoso, el verdadero director del TurPlan y a Mirta Barroso, incansable trabajadora. También recuerdo el apoyo continuo y sin fisuras del sector privado, liderado por extraordinarios empresarios como Ricardo Becaccecci, Luis Rodríguez, Elsa Scafatti, Tito Sótano o Raúl Vázquez, entre otros muchos.

Además, se produjo un insólito consenso político, donde todos los Intendentes participaron y sumaron en este proceso, gracias al magnífico trabajo del Presidente de la Comisión de Turismo del Senado, Jorge Herrera (de otro partido político, pero con una clara visión de lo que era lo mejor para la Provincia).

La palabra “Gobernanza” tiene muchos años, se utiliza continuamente, pero creo que la primera vez que se materializó en la actividad turística de Latinoamérica. Sí, han leído bien, de Latinoamérica, fue cuando en 2001 el “Plan de Desarrollo Turístico de la Provincia de Mendoza, TurPlan” fue firmado por el Gobernador, sus Ministros, todos los Intendentes de la Provincia, los Rectores de las distintas Universidades, los Partidos Políticos y los presidentes de todas las Cámaras de Turismo de los distintos territorios mendocinos.

Fue un hecho sin precedente, de unión de todos los agentes públicos y privados de la Provincia, en un camino conjunto, de trabajo colaborativo sin fisuras, de apoyo en el desarrollo de las estrategias trabajadas, diseñadas y aprobadas entre todos.

Creo que ese fue el inicio de lo que hoy es una lindísima realidad, un sector generador de empleo y riqueza, tanto para las actividades turísticas, como para las que no lo son, con un fuerte impacto en el sector comercial, primario o de los servicios.

Pero, sobre todo, con unas perspectivas de seguir creciendo para convertirse, quizás, en el principal motor de la economía mendocina.

Quien firma este escrito, ha viajado repetidamente por todos los países latinoamericanos y provincias argentinas, y considero que la Provincia de Mendoza es el destino más integral y más atractivo de todo el continente. Otras provincias podrán tener un recurso más significativo, pero la de Mendoza es un destino mucho más atractivo y multi motivacional que el resto.

Los mejores paisajes naturales, las mejores rutas enoturísticas, establecimientos de una exclusividad sin igual, lagunas y montañas, posibilidades de hacer actividades únicas de senderismo o cabalgatas por la cordillera, recursos sin igual, y con gran crecimiento de los segmentos cultural, de congresos o incentivos. Además, observo con gran satisfacción cómo en el Ente Mendocino de Turismo se sigue trabajando con la premisa de la coordinación pública y privada, en el desarrollo conjunto de las estrategias que se ejecutan.

Es cierto que Mendoza tiene un problema, que los grandes mercados emisores, Norteamericanos o de los países Europeos, están a demasiadas horas, pero también es cierto que tiene las potencialidades, por las que estoy seguro que la va a seguir posicionando como una de las provincias líderes en calidad y competitividad en su entorno regional.

Creo que es necesario resaltar a las personas que lideraron el camino turístico que ha hecho que hoy esta actividad sea una preciosa realidad y creo que es necesario volver a articular un proceso de futuro, integrado por todos, para que Mendoza siga siendo el referente turístico de la Argentina.

Rafael Fuentes es Doctor en Ciencias Económicas, profesor de la Universidad de Málaga (España) y colaboró en la planificación del desarrollo turístico mendocino.