En imágenes: así fue la formación intensiva de instructores de la Policía de Mendoza en “armamento no letal y crisis”
Un grupo selecto de efectivos culminó una capacitación especializada en el uso de pistolas Taser y en técnicas de intervención ante situaciones críticas, con el objetivo de formar instructores que luego capacitarán al resto de la fuerza. La iniciativa forma parte de una estrategia integral de modernización de la seguridad provincial y busca estandarizar el uso de armamento no letal con protocolos técnicos y legales.
La Policía de Mendoza completó una exigente capacitación para nuevos instructores en el uso de pistolas Taser y en respuesta táctica ante situaciones de crisis, con el fin de poder instruir a toda la fuerza en su uso. Esta formación, que se desarrolló desde fines de abril, incluyó prácticas con dispositivos reales, simulacros operativos y capacitación legal, con el objetivo de profesionalizar y estandarizar el uso de armamento no letal.
Como parte de la estrategia integral de modernización, el Gobernador Alfredo Cornejo y la ministra de Seguridad y Justicia, Mercedes Rus, encabezaron una simulación controlada en la Base Cóndor, donde se presentaron oficialmente los nuevos modelos de pistolas Taser que la Policía proyecta incorporar próximamente.
Veintiocho efectivos, 24 del Centro de Adiestramiento Táctico Policial (Catacpol) y 4 de las Fuerzas de Operaciones Especiales (FOE), recibieron la formación rigurosa basada en estándares técnicos y jurídicos. El curso abarcó prácticas con dispositivos reales, simulacros operativos y formación legal sobre el uso de esta herramienta de inmovilización electrónica, que permite intervenir en situaciones de alto riesgo sin recurrir a armas de fuego.
Paralelamente, los efectivos entrenaron en técnicas de respuesta ante tiradores activos, un escenario crítico donde personas armadas irrumpieron en espacios cerrados con la intención de causar víctimas indiscriminadamente. Los simulacros prácticos fueron desarrollados por instructores habilitados y tuvieron como objetivo fortalecer la capacidad operativa ante emergencias extremas.
Durante la presentación en la Base Cóndor, las autoridades presenciaron una simulación que demostró el funcionamiento técnico de las pistolas Taser, y entregaron los certificados correspondientes a los instructores que finalizaron la capacitación, reconociendo el esfuerzo y el compromiso asumido en el proceso formativo.
La ministra Rus subrayó la importancia de un protocolo estricto y una capacitación continua para garantizar su correcta utilización. “Estas pistolas no son armas letales, sino que están diseñadas para evitar desenlaces fatales en situaciones donde antes sólo se contaba con armamento tradicional. Existen restricciones claras en su uso, especialmente en personas vulnerables, y por eso hemos profesionalizado toda la etapa de instrucción”, explicó.
Formación institucionalizada y expansión prevista
El Ministerio de Seguridad y Justicia aprobó cuatro cursos formativos oficiales: uno, destinado a cuerpos especiales como el GRIS y el GES; otro, a la capacitación de instructores; un tercero, para todos los efectivos policiales; y un cuarto, para personal de seguridad privada y cuerpos de seguridad ciudadana, quienes podrán incorporarse una vez que la legislación lo permita.
“Los cursos ya están redactados. Las guías se aprueban por primera vez y este esquema formativo se incorpora de manera permanente al plan anual de capacitaciones”, destacó la ministra.
Una política con historia: Mendoza, pionera desde 2006
Mendoza fue la primera provincia argentina en incorporar pistolas Taser, en 2006. Inicialmente, su uso estuvo restringido a cuerpos especializados como el GES y el GRIS, y en escenarios críticos como secuestros extorsivos, atrincheramientos y restricciones a la libertad.
Con esta nueva etapa, el Gobierno provincial apunta a ampliar el uso responsable y profesional de estas herramientas, fortaleciendo la capacidad policial para proteger a la comunidad con métodos más seguros y efectivos.