La Dirección General de Protección y Salud Mental trabajan para aunar criterios de intervención
Con una mesa de trabajo que comenzó el miércoles pasado y tendrá continuidad el 21 de diciembre, autoridades de la Dirección General de Protección y representantes de distintos efectores de Salud Mental de la provincia buscan unificar estrategias y acciones en pos del bien superior de niños, niñas y adolescentes.
Autoridades de la Dirección General de Protección (DGP) y representantes de Salud Mental de la provincia, dependiente del Ministerio de Salud, Desarrollo Social y Deportes dieron inicio, el miércoles pasado, a una serie de encuentros con la modalidad de mesa de trabajo interdisciplinaria. El objetivo es unificar criterios para elevar la calidad profesional en las intervenciones.
Como protagonistas principales de esta primera reunión estuvieron presentes las coordinadoras de los ETI (Equipos Técnicos Interdisciplinarios) de la Zona Norte, compuesta por los departamentos de Capital, Maipú, Lavalle, Lujan, Godoy Cruz y Las Heras.
Entre los temas abordados durante el encuentro, se destacaron las derivaciones realizadas por los ETI en el marco de la Ley de Salud Mental 2.657. Con el mismo eje, también se debatió sobre la incumbencia estricta de estos equipos interdisciplinarios y la necesidad en situaciones particulares de ampliar competencias de los efectores de Salud Mental.
Igualmente, otro de los temas principales sobre los que giró el encuentro fue la correcta utilización, al derivar situaciones, de los niveles en los que se categoriza la atención de la salud, que son tres.
El primer nivel asiste a la mayor cantidad de población, donde la severidad de los problemas de salud plantea una atención de baja complejidad, menor especialización y tecnificación de los recursos. Aquí se desarrollan actividades de promoción y protección específica, diagnóstico precoz y tratamiento oportuno de las necesidades de salud más frecuentes.
El segundo nivel se enfoca en la promoción, prevención y diagnóstico de la salud. Se brindaran acciones y servicios de atención ambulatoria especializada y de hospitalización a pacientes derivados del primer nivel o de quienes se presentan de modo espontáneo con urgencias.
El tercer nivel constituye el centro de referencia de mayor complejidad. Aquí encontramos especialistas para la atención de problemas patológicos complejos, que necesiten equipos e instalaciones especializadas. En este nivel, la categoría de los cuidados tienen el propósito de ayudar a los usuarios más graves son instituciones de mayor complejidad.
Así, dentro del primer nivel se encontrarían los centros de salud y en materia de salud mental los centros de tratamiento infanto-juveniles. El segundo nivel engloba a los hospitales generales con área de Salud Mental, y el tercer nivel a los hospitales y centros especializados en la problemática de salud mental.
“Estamos pensando en estrategias de abordaje, apelando al encuentro donde podamos mejorar la calidad de las intervenciones y conseguir mayor articulación”, expresó Ivana Velázquez, trabajadora social del Área de Salud Mental del Hospital Ramón Carrillo.
Desde la DGP, la directora general, Vanina Barone, puso en valor la importancia de la vigencia de la ley y las incumbencias específicas que determina. “Nos costó mucho llegar a tener una ley como la que tenemos y, si bien su implementación puede resultar difícil, hay que respetarla. Desde la Dirección General de Protección no nos vamos a mover de la posición de su estricto cumplimiento”, enfatizó la funcionaria.
Entre los acuerdos a los que se arribó en este primer encuentro interdisciplinario, se destaca la creación de una preforma de derivación entre los ETI y los distintos efectores de Salud Mental de los tres niveles. Además, comenzar a trabajar en la existencia de un cronograma de trabajo departamental, donde desde las instituciones se puedan aprovechar al máximo los recursos de cada departamento en materia de salud mental y generar un mapa de georreferencia con los efectores de cada departamento.