Lucha Antigranizo: en tres meses se registraron 21 días con tormentas severas
El informe parcial de la campaña 2017-18 señala además que, para optimizar la siembra de nubes se utilizó más pirotecnia, que en las temporadas anteriores.
La Dirección de Agricultura y Contingencias Climáticas presentó un informe parcial de la campaña 2017-18 de Lucha Antigranizo. El parte toma los valores que arrojó el trabajo realizado entre el 1 de octubre y el 31 de diciembre, teniendo en cuenta las mediciones de los radares, las operaciones con aviones, el funcionamiento de los generadores de superficie y el material pirotécnico utilizado.
En términos generales, los resultados de la campaña en curso coinciden con el promedio trimestral histórico. En 92 días, se registraron 21 tormentas severas en las áreas cultivadas y que ocurrieron, en un promedio de 25 días. En cuanto a los días con detecciones de células de tormentas con radar hasta el momento fueron 54, mientras que la media es de 51 días.
El informe indica, además, que se realizaron 135 vuelos de siembra y/o patrulla en los 92 días de campaña y que el promedio histórico es de 130 vuelos. Respecto al tiempo de trabajo de las naves, el informe señala que en los 135 vuelos, se ocuparon 288 horas.
En cuanto al funcionamiento de los generadores de superficie, método que se utiliza en el Valle de Uco, el parte especifica que se necesitaron menos horas de trabajo que lo que señala el promedio. En estos tres meses los artefactos funcionaron 27 días y la media histórica trimestral es de 42 días.
El único valor que varía respecto a los índices de las últimas campañas es la cantidad de pirotecnia: en lo que va de la temporada se utilizó un 25% de ioduro de plata, material que se utiliza en las siembras de nubes. En total, se utilizaron 4.139 bengalas y 2.660 cartuchos.
Según explicaron los responsables del Sistema, el incremento de la cantidad de pirotecnia utilizada se debe a la decisión de reforzar la dosis por célula de tormentas en busca de mejores resultados.
Como ejemplo, en diciembre de la campaña 2016-17 se aplicó una dosis de 12 bengalas por célula y en campaña 2017-18 la dosis subió a 18 bengalas por célula. Cabe aclarar que estas maniobras para optimizar la siembra fueron posibles por la disponibilidad de material.