RECOMENDACIONES PARA EVITAR LA INTOXICACIÓN CON MONÓXIDO DE CARBONO

Estas intoxicaciones están relacionadas en su mayoría con el uso de artefactos de gas instalados de manera deficiente o defectuosa, ubicados en ambientes carentes de una buena ventilación.

Cada año, el Centro Provincial de Intoxicaciones del Ministerio recibe en promedio 2000 consultas por distintos tipos de intoxicaciones, donde el 1,42% corresponden a intoxicaciones por monóxido de carbono.

Este gas venenoso puede intoxicar y matar repentinamente, ya que a su toxicidad se le suma la peligrosidad de no provocar ningún tipo de reacción, por parte de las personas expuestas, por no tener olor, color, sabor y ni provocar irritación en ojos o nariz, por ello se lo conoce como el asesino silencioso.

¿Cuáles son los síntomas de intoxicación por monóxido de carbono?

Debido a que muchos de los síntomas del envenenamiento con CO son similares a los de la gripe, a los de intoxicación por alimentos o a otras enfermedades, es importante aprender a reconocerlos para tomar medidas inmediatas si estos síntomas aparecen.

Recuerde que ante una intoxicación por monóxido de carbono lo más frecuente de encontrar es: dolor de cabeza, mareo, cansancio, debilidad, náusea, vómitos y diarrea. A lo que se puede sumar dolor de pecho, confusión mental o desmayos. La muerte puede sobrevenir si los niveles de CO son elevados o si se respiran niveles más bajos durante un tiempo prolongado.

– Qué hacer si hay síntomas de intoxicación por monóxido

Ventile el ambiente contaminado, abra puertas y ventanas, apague los artefactos que utilizan combustibles.
Si es posible, salga del domicilio y vaya inmediatamente a un lugar donde pueda respirar aire fresco, llame al 911.
Si el intoxicado está inconsciente, póngalo de costado (posición lateral de seguridad), y espere la llegada de la ambulancia.
No suministrarle nada por boca, y provea oxígeno lo antes posible.
Si puede movilizarse vaya de inmediato al Hospital o Centro de Salud más cercano y diga al profesional que usted sospecha intoxicación por CO.

Recordar

Al comenzar cada invierno, haga inspeccionar por un técnico especializado las instalaciones de gas: calefones y calderas, hornos, estufas y hornallas, además de sus chimeneas.
Revise periódicamente las salidas al exterior de estufas, calefones, cocina, hogar a leña, etc.; controle que estén bien conectados y en buenas condiciones, vea que no estén bloqueados por hojas o nidos.
Escoja aparatos domésticos que posean válvula de seguridad y que eliminan los gases de la combustión al exterior de su casa (tiro balanceado)
Los artefactos a gas deben instalarse correctamente y mantenerse según las instrucciones del fabricante.
Si usa estufa a kerosén o a gas, sin salida al exterior, siga cuidadosamente las instrucciones que trae el aparato y use el combustible apropiado.
Siempre deje abiertas las puertas que dan al resto de la casa. Mantenga una ventana algo abierta para que entre aire y así la combustión sea adecuado.

Cuidado

No use el horno de gas para calentar su casa, aunque sea por poco tiempo.
No use estufas de gas en el baño.
No se vaya a dormir dejando la estufa a gas o a kerosén encendido, salvo que el artefacto sea tiro balanceado.
No use conexiones “caseras” de gas.
No encienda el motor de un auto dentro del garaje, aunque tenga la puerta abierta. El humo puede concentrarse rápidamente en el garaje o en el resto de la casa.
No realice viajes largos con las ventanillas cerradas del vehículo ya que los gases del caño de escape pueden penetrar al habitáculo y producir síntomas de intoxicación.
No accione un generador, una máquina de lavado a presión, o un motor a nafta dentro de un sótano, garaje u otra estructura cerrada, aun cuando las puertas o ventanas estén abiertas, a menos que el equipo haya sido instalado y provisto de salida de ventilación por un profesional;

Nunca se deben ignorar los síntomas de envenenamiento por CO, especialmente si más de una persona siente los mismos síntomas, el no actuar a tiempo puede llevar a la pérdida de conocimiento y la muerte.

El monóxido de carbono (o CO), se produce por una mala combustión de cualquier sustancia orgánica. El gas natural y el de garrafa no contienen monóxido de carbono, pero su mala combustión, sea por una deficiente entrada de aire, falta de oxígeno en la habitación, o por suciedad en los quemadores, lo genera y libera al ambiente.

Las fuentes más comunes de producción de monóxido de carbono son los calefones instantáneos (instalados en baños o con tirajes inadecuados), hornos, estufas mal calibradas, braseros y todo escape de gases de cualquier motor a combustión.

Así, el monóxido de carbono liberado por estas fuentes, puede acumularse libremente en espacios cerrados donde las personas lo inhalan sin darse cuenta.

El gasletal ingresa al organismo a través de los pulmones, pasando a la sangre donde ocupará el lugar dispuesto para el oxígeno en la hemoglobina de los glóbulos rojos. De ésta manera se reduce la capacidad de la sangre para transportar oxígeno hacia los tejidos, donde se ven afectados principalmente al cerebro y al corazón.

Fuente: Prensa Ministerio de Salud