“Sentimos orgullo porque un Gobernador se ocupa de la gente humilde”

María trabaja en el basurero desde hace 32 años, mientras que Estela lo ha hecho a lo largo de 34 años. Las mujeres forman parte de diferentes grupos familiares que se dedican a buscar y seleccionar elementos entre los desperdicios para ganarse la vida.

Estas humildes trabajadoras se mostraron sorprendidas y agradecidas por la visita del gobernador Pérez a “El Pozo” de Godoy Cruz.

“Es la primera vez, desde los años que yo llevo trabajando, que viene un Gobernador y no tiene miedo de ensuciarse sus zapatos.”, comentó María; a lo que María agregó: “Es la primera vez que realmente un Gobernador se preocupa por la gente del Pozo. Es que la gente no se anima a venir, dicen que los que trabajamos acá somos delincuentes y que le vamos a robar algo. La gente del vaciadero está mal vista. Decir que trabajamos en el vaciadero es una mala palabra para ellos y no es así, porque nosotros trabajamos acá porque realmente no tenemos otro trabajo. La educación que nos han dado nuestros padres, algunos no la hemos aprovechado, y otros nos quedamos embarazadas de chica y no hemos tenido posibilidades de seguir estudiando. Por eso tuvimos que volver a trabajar al vaciadero”.

María se llevó una buena impresión. “Es una alegría muy grande, porque por lo menos tenemos el orgullo de que un Gobernador se preocupa por la gente que en realidad trabaja. El orgullo para nosotros es que el Gobernador dio la cara con la gente humilde, con la gente de las villas, no nos margina”.

Estela, otra de las mujeres que vive de la recolección de basura,coincidió: “Por lo menos hasta aquí me quedo con una impresión muy buena, vemos que no se ha olvidado de la gente del Pozo. Como le dijimos la primera vez ‘que lo escriba con la mano no lo borre con el codo’ y estamos viendo que no lo está haciendo”.

Las mujeres señalaron que Pérez les ofreció apoyo para poder seguir con la actividad, pero también poder mejorar su situación. “En una oportunidad el señor Cornejo nos quería cerrar el vaciadero y de ese modo quedamos todos a la deriva. ¿Y nosotros de qué vivimos? El señor Paco dio la cara a todos nosotros acá, nos prometió que vamos a seguir trabajando acá”.

“Estamos en conocimiento de que esto no va a durar mucho, pero por el momento nos ha ayudado, nos ha entregado gorras, guantes, botiquines, nos van a construir baños, va a colocar luces hasta la entrada del lugar. Por lo menos vamos arribando”, comentó María.

Estela, resaltó que el Gobernador escuchó los reclamos: “Porque la primera vez que vino, todos creíamos que venía a cerrar el vaciadero, por eso la gente estaba toda furiosa. Pero después nos explicó que no, que ellos querían buscar otras fuentes de trabajo, para que estemos mejor y no sigamos trabajando en la basura, como venimos haciendo hasta ahora. Quieren que tengamos un trabajo digno, cobertura médica, seguro por si nos lastimamos. Y sobre todo tener un hogar, un trabajo digno para que nuestras generaciones no sigan trabajando y revolviendo la basura, y que ellos puedan tener un trabajo mucho mejor”.

La pequeña comunidad del Pozo busca mejorar sus condiciones y han desarrollado una cancha para los chicos, “queremos abrir un polideportivo para los niños, una escuela digna, un centro de salud más cercano, para poder auxiliar a las personas. Al Gobernador le dijimos lo que hemos logrado y él está muy conforme con eso. Nos reunimos todos los viernes con los delegados”, añadió María.

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